Apple iGo: coches eléctricos que se manejan desde la ‘Nube’
Con Apple dominando el mercado de la teléfonía móvil, los tablets y los reproductores de música, ¿cuál podría ser su nuevo modelo de negocio? Shane Baxley, un licenciado americano en Diseño del Transporte por la ‘Art Center College of Design’ de Pasadena, ha pensado que los coches podrían ser una buena forma de diversificar su negocio. Y para ello ha creado el proyecto denominado Apple iGo (web oficial). Tampoco parece una idea descabellada cuando en el pasado ya se habló del iCar o coche de Apple.
Según publica Carscoop, el Apple iGo fue desarrollado en abril. Consiste en un servicio de ‘car-sharing’ (coche compartido) diseñado con el gigante americano en mente. En concreto se trata de tres vehículoseléctricos autónomos: el iMe, un vehículo monoplaza ultracompacto diseñado para entornos urbanos; el iWe, un familiar para viajes más largos; y el iUs, una versión del anterior que puede ser controlada por el conductor -es el único de los tres que puede hacerlo-.
De acuerdo con el proyecto, los tres coches eléctricos autónomos de Apple serían controlados desde ‘la Nube’ o iCloud. Un espacio virtual que, según Baxley, controlará hasta el 75% de todos los vehículos presentes en la carretera y que les permitirá moverse a gran velocidad, a escasos metros unos de otros y de forma totalmente segura y libre de emisiones.
Cada autónomo de Apple está diseñado para adaptarse a su cometido. El iMe se recarga de forma inalámbrica durante sus rutas urbanas y tiene una autonomía de 55 km. El iWe es completamente simétrico en su parte delantera y trasera (los faros pueden actuar como pilotos y viceversa), y está orientado a viajes por autopista (tiene unos 480 km de autonomía). Finalmente, el iUs es una versión deportiva biplaza del iWe con una estética diferenciada (es capaz de recorrer 320 km con una sola carga).
Los Apple iWe e iUs emplean baterías de litio fabricadas por Tesla. Según su creador, el diseño de su chasis ofrece numerosas ventajas estructurales, una excelente distribución del peso y un centro de gravedad bajo. Gracias a su motor eléctrico, el primero alcanza los 100 km/h en menos de 5 segundos.